miércoles, 21 de noviembre de 2012

Mitología en el Arte (VI)

 
 
El Nacimiento de Venus
Sandro BOTICELLI, Siglo XV
Galería de los Ufizzi de Florencia
   


 
En el siglo VII a.C suele aprarecer con corona y con suntuosos vestidos, pero desde el siglo IV a.C. ya se la representa desnuda o casi, con un amplio repertorio de posiciones. Los animales favoritos de la diosa eran las palomas -un tiro de estas aves arrastraba su carro- y sus plantas, la rosa y el mirto.
El nacimiento de Venus,  ha sido transmitido según dos versiones: o es la hija de Zeus y Dione, según Platón, o bien es la hija de Urano, cuyos órganos sexuales, cortados por Crono, cayeron al mar y engendraron a la diosa. Apenas salida del mar, los Céfiros la llevaron primero a la isla de Citera y luego a la costa de Chipre, donde fue acogida por las Estaciones, vestida, ataviada y conducida por ellas a la morada de los Inmortales.
Afrodita se casó con Hefesto, pero amaba a al dios Ares, el dios de la guerra. Según Homero, los dos amantes fueron sorprendidos de madrugada por el Sol, que todo lo ve, y se lo contó a Hefesto. Éste preparó una trampa secreta, una red mágica, que él sólo podía accionar. Cuando una noche los vio en el lecho, activó la red y llamó a todos los demás dioses del Olimpo para que lo vieran. El espectáculo estaba asegurado y todos se rieron de los dos amantes. Afrodita, avergonzada, se marchó hacia Chipre.
Otro episodio conocido es el de Adonis: Cuando Mirra, convertida en árbol, dio a luz a Adonis, la diosa recogió al niño, que era muy bello, y lo confió a Perséfone. Después, ésta se negó a devolverlo. El caso fue sometido a Zeus, quien decretó que el joven permanecería un tercio de cada año con Perséfone, y los otros dos tercios con Afrodita. Sin embargo, malherido por un jabalí, tal vez víctima de los celos de Ares, Adonis murió.

jueves, 15 de noviembre de 2012

Mitología en el Arte (V)

Júpiter y Sémele
P. Rubens, siglo XVI-XVII
Museo de Bellas Artes de Bruselas

 
Representa el mito de Sémele carbonizada por un rayo de Júpiter. Sémele aparece tendida en un lecho y Júpiter a su lado, armado con su rayo.
            En la tradición tebana, Sémele es hija de Cadmo y Harmonía. Fue amada por Zeus y concibió a Dioniso. Hera, celosa, le sugirió que pidiese a su divino amante que se le apareciese en toda su gloria, Zeus, que imprudentemente había prometido a Sémele concederle cuanto le pidiese, tuvo que aproximarse a ella con sus rayos, y Sémele murió  al instante, carbonizada, pero Zeus consiguió salvar al niño que llevaba en su vientre y lo introdujo en su propio muslo, donde terminaría la gestación. Así nació Dioniso, el resucitado, el nacido dos veces. Las hermanas de Sémele propagaron el rumor de que había tenido un amante vulgar, pero que se había jactado de haber obtenido los favores de Zeus y éste, para castigarla, la había fulminado. Esta calumnia tuvo consecuencias funestas para las culpables, las cuales fueron castigadas en sus descendientes.


jueves, 25 de octubre de 2012

Mitología en el Arte (IV)

 
Dánae recibiendo la lluvia de oro
Tiziano, siglo XVI
Museo del Prado (Madrid)
 
El tema representado es el mito que relata cómo Zeus hubo de transformarse en lluvia de oro para seducir a la bella Dánae. En  la pintura, la joven Dánae, a la que en el lecho acompaña un perro, contempla cómo cae sobre ella la lluvia de monedas, mientras su sorprendida y avariciosa sirvienta intenta recoger en su delantal la mayor cantidad de ellas. La blancura del cuerpo de Dánae contrasta con el cuerpo oscuro y retorcido de la sirvienta, y ambas se destacan sobre un fondo dorado.
            Dánae es hija del rey de Argos Acrisio. Como Dánae deseaba un hijo, Acrisio fue a consultar al oráculo, el cual le predijo que, en efecto, su hija daría a luz un hijo, pero que él moriría a manos de su nieto. Para impedir el cumplimiento del oráculo, Acrisio mandó construir una cámara subterránea de bronce en la que encerró a Dánae, poniéndole una buena guardia. Pero nada pudo evitar que Dánae fuese seducida, según la mayoría de los mitógrafos, por Zeus, en forma de una lluvia de oro que, por una grieta del techo, cayó en el seno de la joven. Al saberlo Acrisio, encerró a su hija y al recién nacido en un cofre, que arrojó al mar. El niño se llamaba Perseo y estaba destinado a realizar innumerables gestas, así como, sin querer, en una competición de lanzamiento de disco matar a su abuelo.

martes, 16 de octubre de 2012

ad Infernos

 
 
Los griegos y los romanos creían que el mundo de los muertos estaba situado bajo tierra. La palabra infernus es de la misma raíz que la palabra inglesa under y no tiene connotaciones peyorativas, sólo significa "lo que está abajo". Sin embargo, ese mundo inferior o "de abajo", al que iban después de la muerte todos los mortales, estaba poblado por diversos y curiosos personajes.
 
 
Los Infiernos estaban divididos en dos partes: los Campos Elíseos, donde iban los dichosos o bienaventurados, y el Averno, donde se ubicaba el Érebo, residencia de varias divinidades, el Báratro, lugar donde sufrían tormento los hombres malvados, y el Tártaro, residencia de Hades o Plutón y héroes o semidioses.
En los Infiernos había cinco ríos, como, v.gr., el Aqueronte, rodeando los Infiernos y la laguna Estigia, cuyo juramento era el más inviolable, incluso para los dioses. Otros ríos eran el Cocito, de un sonido lastimero, el Flegetón, un río de fuego, y el Leteo, cuyas aguas borraban la memoria del pasado.
 

Hades, o Plutón para los romanos, era apodado "el rico", puesto que posee todos los tesoros subterráneos y de la tierra origen de toda la riqueza. Está casado con Perséfone o Proserpina.
El ciprés era el árbol sagrado de Hades, por eso se plantaban cipreses cerca de las tumbas.
 

 
Para acceder a los Infiernos las almas tenían que cruzar el Aqueronte sobre la barca de Caronte. Éste no aceptaba las almas de los que no habían recibido supultura, que se quedaban vagando durante un siglo, y además cobraba una moneda por el pasaje. Por eso se acostumbraba a poner una moneda en la boca de los difuntos.

 
La entrada de los Infiernos era custodiada por el perro Cerbero (se suele citar como can Cerbero), enorme perro de tres cabezas. El único que pudo enfrentarse a él y capturarlo vivo fue Heracles o Hércules.
 
 
Personajes famosos castigados en los Infiernos fueron:

 
Las Danaides, hijas de Dánao, fueron condenadas a llenar una tinaja sin fondo, porque haberse casado con los sobrinos de su padre y haberlos asesinado en la noche de bodas por orden de su padre. Lo hicieron todas excepto Hipermestra, cuyo marido Linceo vengó a sus hermanos matando a las demás.

 
Tántalo fue condenado a pasar hambre y sed por la eternidad por haber inmolado a su hijo Pélope y tras haberlo cocinado ofrecerlo como manjar a los dioses.

 
Ixión fue condenado a dar vueltas atado a un rueda eternamente por haber intentado violar a Hera o Juno.

 
Sísifo, hijo de Eolo, asoló la tierra con sus robos. Fue castigado a subir un enorme peñasco o piedra a la cumbre de un monte, pero ésta resbalaba cuando ya estaba en la cima. Así una y otra vez.

sábado, 6 de octubre de 2012

Mitología en el Arte (III)



Júpiter y Ganímedes
Escultura romana del siglo II d.C.
Museo del Prado (Madrid)

Momento Representado:
A lo largo de la historia del arte el momento preferido de escultores y pintores de este mito ha sido el rapto mismo de Ganímedes por Júpiter/Zeus metamorfoseado en águila.

Causas y Consecuencias:

Ganímedes era un hermoso príncipe hijo del rey troyano Tros. Según el testimonio más antiguo, el de Homero, el joven fue secuestrado por Zeus en el monte Ida de Frigia, lugar donde pasaba el tiempo de exilio al que muchos héroes se sometían en su juventud, cuidando un rebaño de ovejas. 
El mito en sus comienzos carece de connotaciones homoeróticas. Será a posteriori cuando encontremos ciertas referencias: Platón opinaba en su Timeo que el mito de Ganímedes había sido inventado por los cretenses para justificar sus inclinaciones pederastas, que más tarde generalizaron los griegos.
En el Olimpo, Zeus hizo a Ganímedes copero de los dioses en los banquetes, donde se comía ambrosía y se bebía néctar, suplantando a la diosa Hebe. Todos los dioses se llenaron de gozo al ver al joven, salvo la diosa Juno/Hera, por cuya acción odió a los troyanos durante la notoria Guerra de Troya. 
Como el padre de Ganímedes echaba de menos a su hijo, Zeus encomendó a Hermes que le llevara dos caballos tan veloces que podían correr sobre el agua. Además Hermes también aseguró a su padre que el muchacho era ahora inmortal. Más tarde Zeus ascendió a Ganimedes al cielo como la constelación ACUARIO.
En la poesía, Ganímedes se convirtió en símbolo del amor pederástico.

Diseñamos TABELLAE




Cartón, plastilina, pegamento, tijeras e ... imaginación para decorarlo. Para escribir en la tabella un pequeño punzón.

lunes, 24 de septiembre de 2012

Bienvenidos al nuevo curso

Bienvenidos
Comenzamos un nuevo curso en el que esperamos que supere al anterior en todos los sentidos: contacto, conocimientos, experiencias, etc.
 
 
I.E.S. ALQUIPIR
 
Bachillerato 2º Griego y Latín

 
Bachillerato 1º Latín

 
E.S.O. 4º Latín